“Hemos alcanzado tasas de recuperación superiores al 98% para materiales y metales ferrosos, lo que supera con creces nuestras capacidades anteriores”, afirma Isabel.

2. Diseño que prioriza la seguridad
Debido a la naturaleza volátil de las baterías de litio, la seguridad es fundamental. La planta de Sure Origin cuenta con alimentación automatizada, escape de gases inertes y recintos a prueba de explosiones para garantizar el pleno cumplimiento de las normas de seguridad de la UE.
“No hemos tenido ningún incidente de seguridad desde la instalación”, afirma.

3. Configuración escalable y modular
VoltCycle comenzó con una línea de capacidad media que procesa 500 kg por hora y puede ampliarse según sea necesario.
“El diseño modular nos brinda la flexibilidad de expandirnos sin largos periodos de inactividad ni rediseño”, añade Isabel.

4. Cumplimiento ambiental
La planta incluye sistemas de eliminación de polvo, tratamiento de gases y reciclaje de agua, lo que la convierte en una operación de circuito cerrado con emisiones extremadamente bajas.
“El inspector ambiental nos otorgó la máxima calificación a las pocas semanas de la implementación”, comparte.

5. ROI y ventaja en el mercado
El material negro reciclado se ha convertido en una línea de productos rentable.
“Con la creciente demanda de los fabricantes de baterías, ahora ofrecemos materiales reciclados de alta calidad: una nueva vía de ingresos”, señala Isabel.